Diego Maradona era un amante de los autos lujosos y durante su etapa como futbolista en el Sevilla de España durante 1992 y 1993 se trasladaba en un Porsche 911 convertible. Dicho vehículo fue subastado en 574.000 dólares en París.
Ese Porsche convertible, que en la actualidad acusa 120.000 kilómetros recorridos, fue recibido por el astro argentino en noviembre de 1992 para que pudiera desplazarse de su casa en Sevilla al centro del entrenamiento del club, que por entonces tenía como director técnico a Carlos Bilardo.
"Maradona demostró que su pie derecho era tan potente sobre el acelerador como su pie izquierdo con el balón, dado que fue detenido al volante, tras haberse saltado un semáforo y por conducir a 180 km/h en el centro de la ciudad", aportó un comunicado de Bonhams, el sitio especializado que dio a conocer la noticia.
Una vez que Maradona abandonó la institución andaluza, el Porsche fue vendido a un millonario oriundo de la isla española de Mallorca, que lo conservó durante 20 años, antes de pasar por varios coleccionistas franceses.
AFP