viernes 26 de abril del 2024

Dirigentes de amianto

Las bochornosas elecciones en la AFA dejaron expuestos una vez más a los dirigentes del fútbol argentino. La costumbre de mentir, falsear realidades y mendigar favores políticos.

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El significado de la palabra “amianto” es: mineral que se presenta en formas flexibles, brillantes y suaves, que tiene un alto grado de resistencia a la combustión, por lo que se emplea en la fabricación de revestimientos y tejidos resistentes al fuego y al calor. En realidad, la palabra viene del griego “amiantus” y está compuesta por la negación “a” y el sustantivo “miasmatos” que significa mancha, infección o impureza. Por lo tanto, amianto quiere decir, además, es sin mancha o sin impureza.

A los dirigentes de la AFA les corresponde el primer significado del término amianto. Son incombustibles, resistentes a cualquier fuego de indignación que pueda recorrer el país a través de los medios de comunicación y del público futbolero en general. Son de amianto porque están acostumbrados a mentir, a falsear realidades, a disfrazar presupuestos, a pedir y amarrar jueces y asistentes, a mendigar favores políticos y a firmar balances mentirosos.

Si el juego de mesa predilecto de los argentinos es el truco, acá quedó expresado en toda su esencia: la falsedad, la mentira. Yo te hago creer una cosa pero tengo otros elementos para dejarte desairado y ganarte. Te prometo lo que no tengo, para bien y para mal. Me río de tu ingenuidad, me encanta gastarte con algunas palabras en verso, con miradas socarronas y cómplices con mis compañeros. Eso sí que es un juego bien argentino.

El resultado empatado en 38 con un voto doble no fue observado en el “escrutinio” por ninguno de los increíbles inspectores que envío la Justicia, ni por los responsables de cada lista. Eran siete individuos que fallaron a la hora de apilar las boletas, contarlas y darse cuenta de tamaño error. Si es que fue error. Alguna lengua viperina señaló anoche radialmente que quizá haya sido la única manera que tenían las dos listas para sellar un acuerdo posterior al anuncio de que habría elecciones.

En tren de hipótesis, hay varias que también pueden ser creíbles, como que tienen que ser más de media docena, aquellos dirigentes que le prometieron su voto tanto a Tinelli como a Segura, que les guiñaron el ojo cómplice a ambos candidatos y que se mantuvieron en esa línea finísima sin que se les moviera un pelo. Cuando el presidente de Boca, Daniel Angelici, uno de los espadachines de Segura, mocionó la posibilidad de votar a mano alzada como en las asambleas estudiantiles, esos seis o siete directivos se debieron espantar. Quizá haya sido el momento para que los representantes de Crucero del Norte y de Excursionistas emprendieran una rauda salida hacia la autopista Ricchieri, temiendo quedar expuestos.

Encima, la versión sobre que el hombre de Misiones se había ido intempestivamente porque perdía un vuelo en Aeroparque, quedó enseguida en ridículo. No hay vuelos nocturnos a la ciudad de Posadas.

Tampoco quedó clara la situación de Ángel Lozano, el presidente del club Excursionistas del Bajo Belgrano, que abandonó el predio poco después de votar. Lozano fue acusado por el representante de Atlanta de haber renunciado el día anterior e igualmente presentarse a votar (algo que se publicó en la página web oficial de Excursio) pero Lozano lo negó y sufragó igualmente. Después, pintarrajearon el frente del departamento donde vive, con acusaciones de “traidor” y “falso”. ¿A quién traicionó Lozano? ¿Falso con qué lista?

Lo real y concreto es que el papelón se televisó a todo el país, fue una transmisión del estilo de la consagración del Papa en el Vaticano, pero acá no hubo fumata blanca. Fue una certificación de la podredumbre que envuelve al fútbol y que no tiene como única responsable a la AFA. No son pocos los que aventuran una situación estudiada y preparado por aquellos expertos en embarrar la cancha, pero en los escritorios.

En realidad, la versión señala que fue una clara advertencia del segurismo (para llamarlo de alguna manera) hacia Tinelli y su gente, que creía tener la elección ganada, por el vuelco de la opinión pública apostando por una figura popular y querible. De una lista que tiene a Moyano y a Angelici como puntales. Gente acostumbrada a este tipo de situaciones y a tramar y moverse también en las sombras. Moyano dirige un sindicato pesado, con enorme poder de negociación y muchísimos afiliados. Angelici preside Boca, pero además es el hombre que ha designado Mauricio Macri para tener domesticada a la Justicia futura. Tienen buenas cartas y lo saben. Tienen poder y lo usan.

El futuro es una incógnita. Hay dos caminos posibles: elecciones a corto o mediano plazo, mientras sigue el “interinato” de Segura ante la falta de renovación o buscar la manera de unirse en una lista conjunta, donde la lucha por encabezarla será cruel y mucha. Quizá la aparición de un tercer nombre sea la manera de resolverlo y todos felices. No parece que ése sea el final pero no sería una mala idea. Qué le hace una mancha más al tigre, ¿no?

Total, apenas fue un detalle el pedido de detención de José Luis Meiszner y Eduardo Deluca, los laderos de Julio Grondona en la última década de su gestión. Era el momento ideal para demostrar alguna transparencia, prolijidad y profesionalismo en la AFA. El amianto ganó su partida una vez más.