River Plate perdió hoy 3-1 con América de Cali en el Lockhart Stadium de Florida y dejó una pálida imagen en el primer amistoso de la pretemporada que realiza en ese país norteamericano, donde estuvo en juego la Copa Campeones de América.
Juan Camilo Angulo, Ernesto Farías y Cristian Martínez Borja, de penal, marcaron los goles del elenco colombiano que milita en la segunda división del fútbol de su país, a los 3, 18 y 34 minutos del segundo tiempo, respectivamente, y fue el ingresado Leandro Vega, de cabeza a los 18 de esa misma mitad, quien descontó para River.
El cotejo finalizó 9 minutos antes de cumplirse el tiempo reglamentario por decisión del árbitro estadounidense Ted Unkel, quien consideró que era imposible continuar por la cortina de humo proveniente de las bengalas que encendió la parcialidad de América en un estadio que presentó un campo de juego en pésimas condiciones.
Pocas fueron las conclusiones positivas que seguramente pudo sacar Marcelo Gallardo, entrenador de River, porque su equipo por lo general jugó lejos del arco contrario y mostró un nivel de imprecisión que sólo se justifica por las limitaciones físicas y futbolísticas que traen aparejados los trabajos de pretemporada.
Con poca conexión entre líneas, el elenco millonario no sólo estuvo lejos en el primer período de crear situaciones en el arco contrario, sino que pasó dos sofocones en jugadas en las que el Tecla Farías y Juan Camilo Angulo remataron desviado.
Cuando el panorama no podía ser más desalentador por la falta de respuestas de varios intérpretes y la nula profundidad ofensiva, dos desatenciones defensivas, el punto más flaco del equipo, dejaron a River dos goles por debajo de América en el comienzo del segundo segmento.
A los 3 minutos Juan Camilo Angulo sacó un remate inmejorable de tiro libre y adelantó al elenco colombiano, mientras que 9 después el Tecla Farías, ex River, sacó un latigazo de derecha que se metió al lado del palo derecho de un Augusto Batalla que pareció no oponer la resistencia que el disparo precisaba.
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A los 18, Gonzalo Martínez, en su mejor (y única positiva) intervención del partido, ejecutó un centro desde la izquierda con la curva necesaria para que el ingresado Vega se encontrara la pelota de frente y conectara de cabeza hacia el gol.
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River tomó entonces el control del encuentro, pero las falencias defensivas y ofensivas no desaparecieron, y así quedó expuesto en varias ocasiones.
La última oportunidad fue a los 33, cuando Vega, pese a contar con el apoyo de dos compañeros, derribó a Juan Angulo dentro del área y el árbitro cobró un penal que Borja cambió por gol a los 34.
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Dos minutos después, una humareda roja que provino de la cabecera donde se ubicaban los hinchas del equipo colombiano obligó a decidir la finalización anticipada de un encuentro que expuso flaquezas de un River que tendrá la chance de mostrar una mejor versión el miércoles en Orlando ante Motagua de Honduras, en su segundo amistoso de pretemporada.
Fuente: DyN
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