Desde la salida de Roman Abramovich de la presidencia del Chelsea, determinada por las autoridades de la Premier League, por su relación con Vladimir Putin en medio del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, el conjunto de Londres cayó en picada.
Quien tomó la posta fue Todd Boehly que adquirió el club por 4.250 millones de libras cuando el club atravesaba un delicado momento institucional y económico. Por ende, la ilusión de los hinchas del equipo de Londres despertó nuevamente.
De todos modos, esa ilusión se desplomó. La salida de Tomás Tuchel, seguido del fugaz paso de Graham Potter y el interinato de Frank Lampard en el último tramo de la temporada arrojaron como resultado una de las peores temporadas del Chelsea en el último tiempo.
Eliminado en cuartos de final en la Champions League tras caer de manera contundente con el Real Madrid y quedando decimosegundo en la Premier League, fuera de zona de copas europeas, Boehly tomó la decisión de traer a Mauricio Pochettino para que tome las riendas del equipo.
El entrenador argentino tendrá su tercera experiencia en el fútbol inglés tras dirigir el Southampton y posteriormente el Tottenham, equipo que llevó a una final de Champions League.
Con ese historial en otro de los equipos de Londres, desde el Chelsea vieron que el Pochettino es el nombre indicado para que los Blues resurjan.
Encarando el mercado de pases, el ex jugador de Newell’s se tomó a pecho el armado del equipo y la limpieza de nombres fue incesante.
En un plantel rico en nombres propios, Pochettino no contará con los siguientes jugadores que ya saben sus nuevos destinos: N’golo Kanté, Hakim Zyech, Edouard Mendy y Kalidou Koulibaly, que en esta ola del fútbol de Arabia Saudita en seducir estrellas partirán al Al Attihad, Al Nassr, Al Alhi y Al Hilal respectivamente.
Otros nombres importantes que arman las valijas, pero en este caso a rivales directos, ya que se sumarán a otros equipos de la Premier, Mason Mount partirá al Manchester United, Kai Havertz al Arsenal y Mateo Kovacic al Manchester City.
Dos nombres que llegaron a mitad de temporada no serán tenidos en cuenta y volverán a sus respectivos clubes de sus préstamos. Joao Félix no cumplió las expectativas y retornará al Atlético Madrid. Misma situación para Denis Zakaria en la Juventus.
Por último, los jugadores que Pochettino ya aviso que no tendrá en su consideración son Conor Gallagher, Christian Pulisic, Ruben Loftus Cheek, Pierre-Emerick Aubameyang y Romelu Lukaku.
Los pesos pesados que se salvan y el capricho de Poch
De cara a la próxima temporada, el entrenador argentino barrió a varios jugadores sin que le tiemble el pulso. De la misma manera rectificó a ciertos jugadores para el armado de su once: Kepa Arrizabalaga, Wesley Fofana, Reece James, Raheem Sterlin y Enzo Fernández.
Para acompañar en el mediocampo a Enzo, ante la imposibilidad de sumar a Alexis Mac Allister, que era pretendido por Pochettino previo a su arribo al Liverpool, ahora el desde del entrenador es contar con Leandro Paredes.
El ex Boca no continuará en la Juventus y el Paris Saint-Germain pretende desprenderse de él. En consecuencia, sumado al deseo de Paredes de continuar en Europa, el escenario es el ideal para arribar al equipo de Londres.
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