El miércoles 21 de febrero, desafortunadamente en el estadio Julio Humberto Grondona se vivió un hecho de violencia que dejó como saldo un futbolista herido en medio del encuentro entre Chacarita y Tigre correspondiente a los 32avos de final de la Copa Argentina.
Al parecer la situación se había originado debido a la expulsión de Agustín Cardozo. Luego de la sentencia de Ariel Penel, varios jugadores de ambos planteles se acercaron al colegiado para reclamarle sobre lo sucedido.
Al mismo tiempo, en las tribunas del recinto deportivo el clima tensionante creció a tal punto de que un hincha del Matador lanzó una botella de agua que finalmente impactó en la cabeza de Fernando Brandán.
Luego de tan lamentable suceso, el jugador agredido rompió el silenció. "Tengo una inflamación dentro del ojo, producto del golpe. Tengo para tres o cuatro días de reposo, con tratamiento y una nueva consulta el lunes a ver si evoluciona. Estoy bastante molesto por el ojo, cuando miro para un costado siento una basurita constante, así que esperando que mejore", puntualizó.
En esa misma línea el jugador de Chaca contó que durante el tumultó observó a las tribunas y pudo apreciar a varias personas que empezaron a tirar algunos objetos. Además consideró que su error fue haberle protestado al colegiado y que en ese momento no tuvo reacción para esquivar la botella.
"Intento agachar la cabeza y me da en el frente, pero la parte de abajo de la botella me da en la pelotita del ojo. En el pómulo no tengo hinchado, yo sentí el impacto en el ojo. En el momento me costaba abrir el ojo, es como si te metieran un dedo muy fuerte en el ojo", añadió.
En charla con TyC Sports, al deportista le consultaron su opinión en relación a las palabras brindadas por Néstor Gorosito. "Es tristísimo, me duele en el alma que digan esas cosas. Antes que nada yo hubiera ido a ver cómo está, y lo primero que dijo fue esa barbaridad. Soy un amante y un apasionado del fútbol, y lo que menos voy a querer hacer es ir a poner mi integridad física por nada, porque no me da ventaja ni me suma para nada, al contrario. Que se diga esa barbaridad, me duele mucho en el alma porque en ningún momento fue así", remarcó.
"Si él se maneja de esa manera por algo es. Yo camino por el lado correcto y con la cabeza levantada, jamás voy a hablar de un colega, y si tengo que hablar algo, es cara a cara. Si Gorosito viene a mi casa a pedirle disculpas a mi familia, lo puedo perdonar. Yo estoy acostumbrado a que me insulten 15mil personas, pero mi familia no está acostumbrada a que yo llegue a mi casa y me pregunten, 'papi, ¿por qué cabeceaste una botella?", puntualizó.
GM