Con la llegada de Lionel Messi al Inter de Miami, empezaron automáticamente los sondeos por otros rostros conocidos para reforzar el plantel, pero sobre todo para que el argentino se sienta lo más cómodo en su nueva aventura en el fútbol de Estados Unidos.
Además de el deseo de cerrar las llegadas de Jordi Alba y Sergio Busquets, compañeros y amigos de Messi en el Barcelona, también apareció en carpeta Luis Suárez. En un principio el delantero uruguayo aseguró que no iría a Miami con la intención de cumplir su contrato con el Gremio.
"Es imposible. Estoy muy feliz en Gremio y tengo contrato hasta 2024", fueron las palabras del Pistolero.
Si bien esa declaración de Suárez, bajándole el pulgar a un posible arribo al club de David Beckham, la dirigencia del Gremio recibió un inesperado mensaje. Suárez les aseguró que tiene las intenciones de retirarse debido a los dolores que arrastra en la rodilla derecha hace un tiempo.
En consecuencia, debido a esa molestia que lo tiene a mal traer, el ex Liverpool tendría decidido colgar los botines. Pese a lo que expresó el jugador, desde el equipo brasileño sospechan que el uruguayo haya cambiado de entender y sí quiera partir hacia Miami para jugar con Messi.
De esta manera, teniendo vínculo con el Gremio hasta 2024, el club brasileño pondría en marcha un plan especial para que no pueda partir al fútbol de Estados Unidos. Es decir, desde el Gremio ejecutarían una especie de cláusula de salida que le prohíba llegar al Inter de Miami.
Los números de Suárez desde su llegada a Gremio
Suárez lleva 26 partidos disputados con el Gremio desde que llegó al club el 4 de enero de este año. Y, hasta el momento, consiguió marcar 14 goles y brindar ocho asistencias.
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