La clasificación de River tras el triunfo 2-1 ante Atlético Tucumán provocó el debate por un nuevo clásico ante Boca que se viene por los octavos de final de la Copa Argentina. Leonardo Farinella volvió a recordar la final de la Copa Libertadores en Madrid como lo máximo que vivió y que nada superará aquel 9 de diciembre de 2018.
"Siento que futbolísticamente no hay nada más después de ese día. Para mí se terminó todo, fue el final de los mundos. Ese partido, si River perdía mi tristeza iba a ser interminable por el resto de mis días. Y al haber ganado mi felicidad es para toda la vida. Por un partido de fútbol", dijo el periodista en el programa Superfútbol, de TyC Sports.
Luego, Farinella reconoció que familiares y amigos pueden llegar a decirle "cabeza de termo" por pensar de esta manera.
"Para nosotros que somos futboleros claro que nos cambió la vida. A River y también a Boca. El problema que tiene Boca hoy es que no lo puede digerir y por eso se hizo esta grieta tan grande y por eso pienso que la sociedad no está preparada para estos enfrentamientos porque es muy grande la alegría y muy grande el dolor.
Farinella y el descenso de River
El periodista e hincha de River también recordó lo vivido en 2011 con el descenso del Millonario a la B Nacional. "Ya veía un proceso que era inevitable. En algún punto cuando uno ve las cosas, las anticipa y analiza el contexto y hacés las cosas mal, está bien que te vaya mal. Es lógico y es justo", sostuvo.
Y volviendo a la final de Madrid, Farinella reconoció que otro pudo haber sido el destino. "Si la pelota de Jara pega en el palo y entra tenemos que hablar de la gallineada y los huevos de Boca que ganaron con nueve jugadores", cerró.
FH